lunes, 20 de abril de 2009

Málaga 1-1 Mallorca


El Málaga tropezó de nuevo en su estadio, esta vez frente al Mallorca, acumulando cuatro partidos consecutivos sin conocer la victoria ante su público. La sensación que se respiraba al finalizar el encuentro fue de haber dejado escapar dos puntos, que pueden ser decisivos al término de la temporada. El empate sitúa al equipo en la misma posición que la pasada jornada, en séptimo lugar, pero ya no iguala a puntos con el sexto clasificado, que se distancia en dos. Los resultados, además, no acompañaron ya que Valencia, Atlético y Deportivo vencieron en sus respectivos encuentros, a excepción del Villarreal, que no pudo obtener un triunfo en su visita a Valladolid y cosechó tablas en el marcador.

A pesar de la tarde nublada que acaecía en la capital costasoleña, con breves intervalos de lluvia, La Rosaleda registró una buena entrada, manteniendo el promedio de asistencia durante el curso.

Las consignas instruidas por el entrenador del Mallorca, Gregorio Manzano, durante la semana previa al partido, considerándolo “clave” para no pasar apuros en la recta final del campeonato, parecieron calar hondo en sus jugadores. El Málaga se adueñó desde el principio del esférico, pero eran pocas las jugadas que podían trenzar debido a las múltiples infracciones que cometían los visitantes, muchas sin señalizar, sabedores del buen fútbol que puede realizar el conjunto malaguista con el balón en su dominio.

Así, cualquier jugada a balón parado o alguna individualidad parecían convertirse en las únicas opciones viables para desnivelar el marcador. Y, de este modo, fue como se adelantaron los locales. Apoño, en un excelente momento de forma, empalmó desde fuera del área un rechace de la defensa, adentrándose en la portería mallorquinista a pesar de la estirada de Lux. Todo un golazo. Pero poco le duró la alegría al Málaga, exactamente seis minutos. El venezolano Arango materializó con un potente disparo una falta que se coló rozando el poste. De nuevo tablas en el luminoso, con el que se llegaría al término del tiempo reglamentario.

Sin tiempo para lamentarse, la próxima jornada dará comienzo mañana, disputándose el miércoles el encuentro ante el Osasuna en el estadio Reyno de Navarra. Así, el Málaga podrá redimirse de este empate que le ha alejado momentáneamente de los puestos europeos.

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